< Previousque sería una impiedad decir que Dios, que es el Creador y Dueño de todo, no tiene derecho a intervenir en el asunto. Además, Cristo mismo se ha comprometido a estar con su Iglesia ‘todos los días hasta la consumación de los siglos’ y aseguró que no permi- tirá que las puertas del infierno preva- lezcan contra Ella. Si es algo sorpren- dente que Cristo intervenga y elija al Papa, mucho más sorprendente sería si Cristo dejara de cumplir su promesa y permitiera la destrucción de su Igle- sia: sería algo imposible. Hay mucho paralelismo entre la apostasía del pueblo judío hace dos mil años, y la apostasía de Roma en nuestros días. El pueblo judío, que en un tiempo fue el pueblo predilecto de Dios, rechazó a Cristo y, guiado por una jerarquía corrompida, le condenó a muerte. El Señor les advirtió antes: «Por tanto os digo, que quitada os será la Gracia de pertenecer al Reino de Dios, y será dada a un pueblo que pro- duzca sus frutos»; refiriéndose al pue- blo gentil, el cual aceptaría su Evange- lio. San Pablo lo explica: «Lamenta- blemente, cuando vino Cristo a predi- car el Evangelio, a la mayor parte del Pueblo Judío, por su obstinación, le quedó velada la Fe en Cristo, y por eso, aún sigue con la Ley Mosaica, pues el velo de esta Ley sólo se quita aceptando la Ley Evangélica. Y aún, en el día de hoy, cuando leen a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos, y les impide ver a Jesucristo en lo que leen; mas, cuando un día se conviertan a Cristo, les será quitado el velo». El pueblo judío y su jerarquía dejaron de pertenecer al Reino de Dios, y Cristo eligió como Cabeza de su Iglesia a un humilde pescador. También en Roma, bajo la dirección de una jerarquía corrompida, sucedió todo lo que acabamos de ver, y los pér- fidos miembros de la iglesia romana caen bajo el mismo anatema que los pérfidos judíos, cumpliéndose de nue- vo lo que dijo de ellos el salmista: «Y sus ojos se oscurecerán de tal manera para que, viendo la Verdad, no la re- conozcan». En ambos casos se aplica la profecía de Isaías que Cristo cita en el Evangelio: «Oiréis, y no entenderéis los misterios; veréis, y sin embargo es- taréis ciegos a la luz de la Verdad. Por- que, al haberse endurecido el corazón de este pueblo, Satanás les ha tapado más sus oídos, cerrado sus ojos, oscu- recido el entendimiento, para que no se conviertan y no reciban de Mí la salvación». Como, en una actitud pro- pia de los hijos de Satanás, rechaza- ban la divina palabra, evitando así el compromiso de convertirse, y rehusa- ron deponer su orgullo y renunciar a sus malas costumbres, el Divino Ma- estro, que respeta la libertad de ellos, les abandona en sus propias tinieblas, permitiendo que el maligno endurezca cada vez más sus corazones. Sin em- bargo, Dios misericordioso deja una puerta abierta para que vuelvan al re- dil: a los que invocan a la Santísima Virgen María con humildad e insisten- cia, les concede la luz.La Iglesia no va a quedar para siempre en el de- sierto, sino «du- rante un tiempo, dos tiempos y medio tiempo», como señala el Apocalipsis. La Ter- cera Guerra Mundial será el castigo de Dios a la gran apostasía general de la iglesia ro- mana, en la cual habrá tal consterna- ción universal que parecerá que el mundo ha llegado a su fin; lo que pro- ducirá en la conciencia de una mayoría de los hombres un profundo sentimien- to de culpabilidad, reconociendo el jus- to castigo de Dios por sus graves deli- tos. Mientras tanto, conviene atender a las advertencias de Cristo en El Pal- mar: «Preparaos, hijos míos. Estad uni- dos bajo el Manto de la Santísima Vir- gen María, pues el antipapa confundirá a la Iglesia terriblemente. Sólo con la oración y la constante invocación a la que es Mediadora Universal de todas las gracias y dispensas, podréis seguir al verdadero Papa». (1971) Los Papas verdaderos de estos Últimos Tiempos son: El Papa San Juan XXIII. Pastor et Nauta. (28-10-1958 al 3-6-1963). Fue el penúltimo Papa verdadero con Sede en Roma. Este Glorioso Papa, debido a su bondad y a su in- genuidad, fue utilizado por los ene- migos de la Iglesia. El Papa San Juan XXIII fue coaccionado y ma- nejado por los masones. El Concilio Vaticano II, en lo que se refiere a su desarrollo y a sus conclusiones acor- dadas, no es obra del Espíritu Santo, sino del demonio.El Papa San Pablo VI. Flos Flo- rum. (19-6-1963 al 6-8-1978). Último Papa verdadero con Sede en Roma. La vida del Papa San Pablo VI fue ejemplar y virtuosa. San Pablo VI, que era conocedor de las Apariciones y Mensajes Celestiales, jamás conde- nó la Obra de El Palmar de Troya ni a su vidente principal Clemente Do- mínguez y Gómez. Este glorioso Papa, durante gran parte de su Ponti- ficado, fue drogado por inicuos miembros de la Curia Romana con el fin de debilitar su voluntad para que quedara a merced de ellos. Tras la muerte del Papa San Pablo VI, se consumó la apostasía general de la iglesia romana, que dejó de ser la ver- dadera Iglesia de Cristo. Por tanto son antipapas Juan Pablo I, Juan Pablo II, Benedicto XVI, Francisco y sus sucesores. El Papa San Gregorio XVII Mag- nísimo. De Glória Olívæ. (6-8-1978 al 21-3-2005). El estigmatizado vi- dente principal del Sagrado Lugar del Lentisco de El Palmar de Troya, Clemente Domínguez y Gómez, más tarde Obispo Padre Fernando en la Orden, nació en Sevilla, España. El día 6 de agosto de 1978, hallándose el Obispo Padre Fernando en Santa Fe de Bogotá, Colombia, falleció el Papa San Pablo VI. Desde ese mismo día, por disposición de Dios, el Padre Fernando pasó a ocupar la Silla de San Pedro, con el nombre de Grego- rio XVII, de Glória Olívæ, pues se apareció Nuestro Señor Jesucristo, acompañado de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, y depositó sobre la ca- beza del nuevo Papa la Sagrada Tia- ra, siendo así coronado de manera misteriosa y profunda. Entre otras muchas cosas, el Señor le dijo: «Co- mienza el Gran Pontificado de la Glo- ria de las Olivas. Sólo los sencillos y humildes de corazón reconocerán al que es el verdadero Papa: El Papa Gregorio XVII». También le anunció que del cónclave de Roma saldría el antipapa. El día 9 de agosto del mis- mo año, el Vicario de Cristo, San Gregorio XVII, llegó a El Palmar de Troya procedente de Colombia, y de esta forma misteriosa quedó traslada- da la Cátedra de San Pedro desde Roma a El Palmar de Troya, que pasó a ser la Sede Apostólica de la Verda- dera Iglesia: la Una, Santa, Católica, Apostólica y Palmariana, también lla- mada Iglesia Cristiana Palmariana de los Carmelitas de la Santa Faz. Así comenzó la historia del Papado en El Palmar de Troya. El Papa San Pedro II Magno. De Cruce Apocalýptica. (21-3-2005 al 15-7-2011). En el siglo, Manuel Alonso Corral, y más tarde Obispo Padre Isidoro María. Nació en Cabe- za del Buey, Badajoz, España. Fue Secretario de Estado durante todo el Pontificado del Papa San Gregorio XVII y es Cofundador de la Orden de los Carmelitas de la Santa Faz. El 24 de octubre del año 2000, el Papa San Gregorio XVII Magnísimo, le nombró como Sucesor suyo en la Cátedra de San Pe- dro. El Papa San Pe- dro II, con vigorosa valentía, apacentó el rebaño de la Iglesia Católica Palmariana. Con verdadera en- trega y fidelidad a los planes divinos, se preocupó de comple- tar la labor difusora de la Santa Biblia Palmariana y otros documentos, desta- cándose sus Cartas Apostólicas y los Mensajes del Palmar. Fruto de este glorio- so Pontificado es también la Historia Eclesiástica Palma- riana. Definió infaliblemente que el Anticristo nació en el año 2000, en Belén, la misma ciudad en que nació Nuestro Señor Jesucristo. El Papa San Pedro II Magno murió santa- mente en el Sagrado Lugar de El Pal- mar de Troya, el día 15 de julio del 2011. El ex Papa Gregorio XVIII el apóstata. Recéptor Christi. (15-7- 2011 al 22-4-2016). Llamado en el si- glo Ginés Jesús Hernández Martí- nez, nació en Puebla de Mula, Mur- cia, España. Ingresó en la Orden en 1984, siendo más tarde el Padre Ser- gio. San Pedro II le tuvo como Secre- tario de Estado y le nombró su suce- sor en el Papado. Por su infidelidad a Dios, este Papa triste- mente apostató de la Iglesia en abril de 2016, tres años después de haber nombrado a su Secretario de Estado, Reverendísimo Padre Eliseo María, como su- cesor suyo en el Papa- do. Su Santidad el Papa Pedro III. De Glória Ecclésiæ. (Desde 22-4- 2016 hasta ahora). En el siglo Markus Josef Odermatt, y más tarde Obispo Padre Eliseo María. Nació en Stans, Nidwalden, Suiza. Es descendiente de San Nicolás de Flüe, ermitaño del siglo quince venerado en Suiza como padre de la patria, cuyo único alimento durante veinte años era la Santa Comunión y que lo- gró librar a su país de una fatal gue- rra civil, y ayudó milagrosamente a que Suiza no entrara ni en la Primera ni en la Segunda Guerra Mundial. La bandera de ese cantón, Nidwalden, ostenta el emblema papal de las llaves del Reino de los Cielos en honor a su patrón San Pedro Apóstol. El Obispo Padre Eliseo María ingresó en la Or- den de los Carmelitas de la Santa Faz en 1985, y estuvo dieciocho años de misionero en Sudamérica. Fue Secre- tario de Estado durante todo el Ponti- ficado del ex Papa Gregorio XVIII. En 2013 el ex Papa Gregorio XVIII le nombró como Sucesor suyo en la Cátedra de San Pedro. El Papa Pe- dro III ha conservado el nuevo calen- dario, por lo que la Semana Santa Palmariana, todos los años, comenza- rá el 20 de marzo y terminará con la Conmemoración del Domingo de Re- surrección, el día 27 de marzo, y que el 25 de marzo, fecha en que murió Nuestro Señor Jesucristo, siempre será en Conmemoración del Viernes Santo, independientemente del día de la semana en que caiga. En un mundo de apostasía general, Su Santidad el Papa Pedro III, como Buen Pastor de las almas, mediante sus Cartas Apos- tólicas defiende y proclama con cora- je la Doctrina y Moral Sacrosantas, combatiendo así los errores y demás costumbres corrompidas. Desde el Místico Desierto de El Palmar de Troya, Su Santidad el Papa Pedro III, como verdadero Vi- cario de Cristo, sigue apacentando el rebaño de la Iglesia Una, Santa, Ca- tólica, Apostólica y Palmariana a Él confiado por su Divino Fundador, Nuestro Señor Jesucristo. En un mundo de apostasía general este Gran Caudillo del Tajo combate los errores y aberraciones actuales con firmeza y valentía, preparando así la Iglesia para los acontecimientos apo- calípticos venideros, que culminarán con el muy próximo Glorioso Segun- do Advenimiento de Cristo. La Iglesia Palmariana, como excel- sa Precursora, prepara los caminos del Retorno de Cristo para implantar el Reino Mesiánico en la Tierra, lu- chando valientemente en esta Era Apocalíptica contra los errores y en- gaños esparcidos por Satanás, que no tardará mucho en manifestarse públi- camente como Anticristo, el Hombre de Iniquidad.Next >